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Cuadros que acabaron de las formas más extrañas en los museos

| Gabriel García Moreno

El mundo del arte está lleno de historias fascinantes, y las obras maestras que se exhiben en museos famosos como el Museo del Prado en Madrid, el Museo de Orsay en París y el Museo del Louvre son testigos de un legado artístico invaluable. Sin embargo, algunas de estas obras de arte han llegado a sus actuales hogares de una manera verdaderamente extraordinaria. En este artículo, exploraremos las formas más raras y sorprendentes en las que algunas de las obras de arte más célebres de estos museos fueron adquiridas.

1.Cómo llegaron las Meninas al Museo del Prado

El Museo del Prado alberga una extensa colección de arte español, incluyendo algunas adquisiciones peculiares. Una de ellas es "Las Meninas" de Diego Velázquez, una de las obras más emblemáticas del museo. Sorprendentemente, esta pintura maestra fue adquirida por el rey Felipe IV como un regalo para su esposa, la reina Mariana de Austria. No fue encargada por la corona, sino que Velázquez decidió pintarla por su propia iniciativa, lo que la convierte en una adquisición inusual y espontánea.

2.La Noches Estrellada en el Museo de Orsay:

El Museo de Orsay es famoso por su colección de arte impresionista y postimpresionista. Una de las pinturas más reconocidas es "La noche estrellada" de Vincent van Gogh. Sin embargo, lo que muchos no saben es que esta obra maestra no fue adquirida por el museo directamente. Fue heredada por el gobierno francés en 1927 después de la muerte de Gustave Caillebotte, un pintor y mecenas de las artes, quien la había adquirido previamente. Esta peculiaridad en la adquisición añade un toque de misterio y fortuna a la historia detrás de esta icónica pintura.

3.La Mona Lisa y Francisco I de Francia:

El Museo del Louvre es conocido por albergar una de las colecciones de arte más impresionantes del mundo, incluyendo la famosa "Mona Lisa" de Leonardo da Vinci. Aunque hoy en día se considera un tesoro nacional francés, la adquisición de esta obra maestra no fue un proceso común. Fue adquirida por el rey Francisco I de Francia directamente de Leonardo da Vinci en el siglo XVI. El rey se enamoró tanto de la pintura que convenció al artista para que la llevara consigo a Francia, donde finalmente encontró su lugar en el Louvre.

Las obras de arte exhibidas en el Museo del Prado, el Museo de Orsay y el Museo del Louvre son tesoros culturales de incalculable valor. Sin embargo, las formas inusuales en las que algunas de estas obras fueron adquiridas añaden una dimensión adicional a su historia. Desde regalos espontáneos hasta herencias fortuitas y adquisiciones directas de los artistas mismos, estas anécdotas demuestran que la historia del arte está llena de giros fascinantes.

Algunas de estas obras están expuestas en museos como el Museo del Prado o el Museo del Louvre. Si te interesa el tema te recomendamos El Prado Guía de Arte, una guía artística imprescindible para descubrir y aprender lo esencial de las más grandes obras, artistas y estilos en el Museo del Prado, entre los que se encuentran autores y análisis de estas y otras obras. También puedes encontrar nuestro libro El Louvre Guía de Arte.

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