El misterio del cráneo perdido de Goya

Cuando exhumaron el cuerpo de Goya 71 años después de su muerte, descubrieron que su cráneo había desaparecido. El pintor había sido enterrado en el cementerio de la Chartreuse de Burdeos el 17 de abril de 1828 y en 1899, el cónsul español decidió repatriar su cuerpo. Al abrir su tumba, encontraron que su cabeza no estaba allí. La conmoción fue tal que se suspendió el traslado y cerraron el ataúd como si nada hubiera pasado.

Pero esta historia póstuma no termina ahí. Berna González Harbour, eminencia en el tema, se hizo una pregunta: ¿quién lo hizo y por qué? La respuesta podría estar en la frenología, una pseudociencia con muchos seguidores en la época que afirmaba que la forma del cráneo podía determinar el carácter y las facultades de una persona. El robo de cráneos en los cementerios era algo común. Cabe destacar que los difuntos que tenían más probabilidades de perder la cabeza eran aquellos que habían destacado por algún motivo intelectual o delictivo.

"Si ese fue el destino del cerebro privilegiado de Goya, nunca lo sabremos, ya que se perdió, pero es probable según los testimonios y el contexto de la época", Berna González Harbour.

Los Fusilamientos del Tres de Mayo, por Francisco de Goya.

González Harbour aporta otro detalle significativo. Recuerda la existencia de una obra del pintor Dionisio Fierros, que se encuentra en el Museo de Zaragoza y en la que aparece una calavera, en cuyo reverso está escrito: "La calavera de Goya pintada por Fierros en 1849". Es decir, 21 años después de la muerte del artista y medio siglo antes de que el cuerpo diplomático español se propusiera devolver a España a su famoso hijo pródigo. La teoría sería: "Fierros lo cogió, lo pintó y el cráneo acabó en la Universidad de Medicina de Salamanca, donde se perdió".

A pesar de la decepción inicial, los restos mortales de Goya acabaron llegando a España en 1919 junto con los de Miguel Martín de Goicoechea, su suegro y verdadero propietario de la tumba en Burdeos. Ambos fueron depositados en la capilla madrileña de San Antonio de la Florida, donde Goya pintó los famosos frescos en 1798, donde aun permanecen a día de hoy.

Si te interesa el tema te recomendamos Guía de Arte del Prado, nuestro libro sobre el museo que alberga la mayor cantidad de obra del inmortal Goya, además de una guía de arte imprescindible para descubrir y conocer lo esencial de las grandes obras, artistas y estilos del Museo del Prado, disponible en Amazon.

Cómprala aquí: https://www.amazon.es/dp/841894336X/